El 1 de enero de 2021 entró en vigor el nuevo reglamento que limita las aportaciones a los planes de pensiones individuales y planes de previsión asegurados pasando de 8.000€ a 2.000€ anuales. Este cambio tiene un impacto directo en el resultado de nuestra declaración de la renta, ya que las aportaciones que realicemos durante el año minoran nuestra base imponible.
Es muy importante que diferenciemos los tipos de renta que hay, ya que para el cálculo del impuesto se clasifican en 2 grandes grupos: renta general y renta del ahorro. ¿En qué se diferencian? ¿Cuáles son los componentes de una y otra? Te lo explicamos a continuación.
Como acabamos de explicar, existen dos grandes grupos de renta: renta general y renta del ahorro. A grandes rasgos, la primera hace referencia a los rendimientos por actividades económicas, mientras que la segunda abarca rentas derivadas de inversiones. Pero vamos a verlo al detalle.
Dentro de la renta general nos encontramos con:
Así, por ejemplo, si el resultado de nuestra renta general son 46.000€ y realizamos una aportación a un plan de pensiones de 2.000€, se reducirá el resultado de la base a 44.000€ y por lo tanto a la hora de aplicar el porcentaje correspondiente el resultado será inferior.
En cambio, la renta del ahorro está compuesta por los rendimientos de capital mobiliario, como por ejemplo:
Veamos cuáles son las principales diferencias entre renta general y renta del ahorro:
La base imponible se divide en dos bloques: la base imponible general que recoge todos los componentes de la renta general y la base imponible del ahorro recoge los componentes de la renta del ahorro.
El tipo impositivo de la renta general es el siguiente. Según la cantidad percibida se le aplica un tipo u otro en función del tramo de IRPF en que nos encontremos:
Tramos IRPF 2021 |
Tipos a aplicar |
---|---|
Hasta 12.450€ |
19% |
De 12.450 a 20.200€ |
24% |
De 20.200€ a 35.200€ |
30% |
De 35.200€ a 60.000€ |
37% |
De 60.000€ a 300.000€ |
45% |
Más de 300.000€ |
47% |
En la renta del ahorro funciona de la misma manera, en función de la cantidad que percibamos se le aplica el tipo impositivo por tramos:
Rentas del ahorro |
Tipo impositivo |
---|---|
De 0€ a 6.000€ |
19% |
De 6.000€ a 50.000€ |
21% |
De 50.000€ a 200.000€ |
23% |
Más de 200.000€ |
26% |
Vamos a verlo de forma más clara con un ejemplo:
Una persona tiene un salario bruto anual de 42.000€. Además, tiene los siguientes rendimientos de capital mobiliario: 1.000€ de participación en fondos propios, 100€ de cesión a terceros de capitales propios y 1.000€ de contratos de seguro de vida o invalidez.
Tramos |
Tipo impositivo |
Cuota |
---|---|---|
Hasta 12.450€ |
19% |
2.365,50€ |
De 12.450€ a 20.200€ |
24% |
1.860,00€ |
De 20.200€ a 35.200€ |
30% |
4.500,00€ |
De 35.200€ a 42.000€ |
37% |
2.516,00€ |
Para realizar una buena planificación fiscal es preciso conocer correctamente qué es la renta general y la renta del ahorro, y así sacar el mayor partido posible a nuestra declaración de la renta. Antes de decidir si debemos o no aportar en un plan de pensiones, si debemos o no subirnos o bajarnos el IRPF, si debemos hacer la declaración conjunta o por separado… es necesario conocer dónde y de qué manera podemos obtener un beneficio.
Si quieres recibir más información, lo más aconsejable es ponerte en manos de un asesor financiero, para que te ayude a sacar el mejor rendimiento posible.