La situación económica actual hace que todos los adultos en edad de trabajar nos planteemos la necesidad de contratar un plan de pensiones que nos ayude a complementar nuestros ingresos cuando llegue el momento de la jubilación. De todos modos, esto no debe hacernos pensar que cualquier producto financiero de este tipo es el más adecuado para nosotros. La edad que tenemos en el momento en que empezamos a contribuir es un factor clave para sacar el mayor partido posible de nuestro plan de pensiones.
Es evidente que si contratamos un plan de pensiones a los 55 años no dispondremos de mucho tiempo para efectuar contribuciones que nos garanticen conseguir un buen patrimonio final. En cambio, si empezamos a cotizar en nuestro plan de pensiones en la treintena tendremos ante nosotros años para ir acumulando una buena cantidad de dinero que nos de tranquilidad en nuestra jubilación.
El factor tiempo será, pues, el elemento que condicionará la elección del plan de pensiones más adecuado cara a nuestra jubilación.
Si contratamos un plan de pensiones con menos de 35 años, podemos optar por un producto de renta variable que nos dé la posibilidad de tener mayores beneficios a pesar de los posibles riesgos.
Hasta los 45 años, es el momento de combinar renta fija y variable para conseguir una buena rentabilidad del plan de pensiones sin correr riesgos excesivos.
Hasta los 55 años, es importante que nos aseguremos una rentabilidad del plan de pensiones. Por lo tanto, debemos priorizar los productos financieros que den renta fija ante los de renta variable.
Finalmente, a partir de los 55 años el tiempo ya juega en nuestra contra. En consecuencia, es importante que corramos los mínimos riesgos posibles en nuestras inversiones aun a costa de conseguir una menor rentabilidad. Optar por productos de renta fija a menos de 2 años vista nos proporcionará la tranquilidad buscada.
En definitiva, los planes de pensiones son la garantía para mantener nuestro nivel de vida cuando dejemos de trabajar y, por lo tanto, no podamos conseguir más ingresos. Por lo tanto, a medida que nos hagamos mayores y nos acerquemos a la edad de jubilación es importante que optemos por productos de renta fija y asegurados.
Consulta con tu asesor de Seguros Bilbao, la mejor solución para tu ahorro de cara a la jubilación.